Tuvimos varias oportunidades de compartir con los pacientes de St. Jude, unos bajo tratamients, otros en remisión, otros totalmente curados. Escuchamos sus historias, los testimonios personales y de sus familiares. Una experiencia muy recompensadora.
Emilio, Betances, Arianna, a todos los demás... que Dios los bendiga. Siempre podrán contar con los ángeles de esperanza.