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Mercedes-Benz SLS AMG 2011

¡Ha vuelto al nido el Gullwing!

Volverán las obscuras golondrinas... ¿golondrinas? Con el debido respeto a Gustavo Adolfo Bécquer, el poeta se equivocó de ave, porque lo que ha regresado es la gaviota. Y qué mejor lugar para anidar que Miami Beach. Hace medio siglo que esperábamos por la vuelta del pájaro pródigo...

por PEPE FORTE, editor del Canal de Autos de iFriedEgg.com
y conductor del programa radial dominical de automovilismo
AUTOMANIA
por
WQBA 1140 AM, una emisora de UNIVISION RADIO. Miembro fundador de SAMA.
Todas las fotos del autor, excepto la del Gullwing de los '50.

Posted on April 26/2010. Reviewed live! on air on AUTOMANIA Sunday April 25/2010

El privilegio de ver a la bestia, tocarla y oírla rugir, más no el de domarla. Eso fue lo que nos pasó al grupo de periodistas de automovilismo del Sur de la Florida que el viernes 23 de abril de 2010 acudimos a una presentación del espectacular Mercedes Benz SLS AMG 2011 en el trendy Hotel Raleigh de Miami Beach. El evento se efectuó en los alrededores de la piscina del hotel colindante con la playa, escoltada por vegetación tropical exuberante, y decorada con los turistas de todas partes del mundo que vienen a disfrutar del excelente clima de la Capital del Sol ya en temporada pre-estival. En dos palabras, hizo un día magnífico. Y justo en ese ambiente tuvimos el almuerzo tras el breefing técnico y el walk-around del coche. Naturalmente estuvieron presentes los ejecutivos e ingenieros de Mercedes, miembros de la junta ejecutiva de SAMA, y la plana mayor de Prestige Auto Specialists y sus hacedores, en tanto que dedicados coordinadores. El evento fue además patrocinado por la Copa Mundial de Polo de Miami Beach que agració a los invitados con un desfile de sus portentosos caballos.

A nivel de rumor, escuchamos que se hospedaba en el hotel la cantante australiana Olivia Newton-John, participante de un evento del que la instalación era anfitriona, para el cáncer de seno.

No, no manejamos el Mercedes-Benz SLS AMG, posado allí al borde de la alberca cual otro vacacionista mas tomando el sol, y provocando en los asistentes la misma tentación que resiste en una dulcería un diabético con las manos atadas. Pero para consuelo, pudimos escuchar su motor, y no exageramos si decimos que el auto atrajo más miradas de admiración sobre su anatomía que la mas bella bañistas que flotaran por allí.
El SLS es una máquina toda la aluminio y que a diferencia de cómo han sido los frutos históricos entre Daimler y AMG, siempre a parte y parte, en este caso el maravilloso engendro lleva la total autoría de AMG, responsable de las versiones supremas de performance de Benz.
Es una máquina 100% de aluminio —pesa sólo 3,573 libras, poco para su talla y motorazo—. La flamante obra de Mercedes es más liviana que el SLR McLaren también gracias a su carrocería de fibra carbón que rehabilita por primera vez en décadas en un modelo de producción las puertas en el techo que estrenara en 1955 el inigualablemente bello Mercedes Gullwing, el auto personal del maestro Fangio. Lo de “gaviota” viene porque con las puertas despelagadas, parece el pájaro con sus alas de silueta quebrada.
El vehículo encarna todo lo que se espera de un genuino auto deportivo de cima. Cuenta con un motor V-8 de 6.2 litros de 32 válvulas que genera 563hp y 479 libras por pie de torsión a tan solo 4750rpm. El motor está ubicado bajo y bien adentro, muy por detrás del eje delantero para una distribución de peso delante-detrás de 48/52%, casi perfecta para su proyección dinámica. Sin embargo, a pesar de adentrado, la ubicación de la planta motriz hace del SLS todavía un front/mid engine car.

Alcanza las 62mph en 3.8 segundos y su velocidad máxima gobernada es de 196mph. En la esquina contraria, los frenos, de carbón-cerámica. Y los neumáticos son Michelin, concebidos específicamente para el auto. Las medidas de éstos: 265/35-19 delante, y 295/30-20 detrás.

El interior inspirado en en un avión caza.

Las famosas puertas ala de gaviota no son animadas por motores eléctricos, sino que hay que abrirlas y cerrarlas manualmente. Según explicaron los ingenieros, de haber usado motores eléctricos para la función se habría añadido peso al vehículo, al tiempo que su ubicación en torno a la bisagras en el techo sin duda hubiese afeado su aspecto exterior. La operación de apertura-cierre de las puertas aunque se realiza entonces a mano pero sin esfuerzo, gracias a una solución tecnológicamente más sofisticada a través de resortes y cilindros de gas comprimido. Esto sí lo ensayamos y la verdad es que no hace falta ser un experto en alterofilia para accionar las puertas.

Finalmente, el precio. Entre $187 y $200 mil dólares. Francamente, por las emociones sensoriales que este auto garantiza —carácter afrodisíaco incluido— nos parece barato el precio. Es mas, erramos en calificarlo así, pues en realidad el Mercedes-Benz SLS AMG 2011, no tiene precio…

A continuación, el resto de las fotos del evento: