Cuando el Ford Explorer modelo 2011 Ford llegue a los concesionarios sobre una plataforma unibody —es decir, integral, carente de chásis— éste no será el único cambio de por sí dramático que el nuevo vehículo estrenará, sino que la quinta generación del SUV introducirá por primera vez en la historia cinturones de seguridad inflables para los pasajeros de los asientos traseros.
Según Ford, estos cinturones inflables ayudarán a distribuir cinco veces major la fuerza del impacto en el cuerpo, comparado con los normales de tira. Y combinados con las bolsas de aire se espera que los pasajeros, especialmente los niños, reducirán los golpes a la cabeza, cuello y pecho. En la eventualidad de un choque, a estas bolsas de aire —que es lo que en realidad son, acopladas a los cinturones—, sólo les toma 40 milisegundos desplegarse por el torso del ocupante. Pero en vez de usar una reacción química térmica como ocurre con las bolsas de aire delanteras y laterales, estos cinturones se llenan de aire frío comprimido en unos cilindros debajo de los asientos.
Estos cinturones son semejantes a los “normales” y se usan exactamente igual. También son compatibles con los infant seats, y 90% de las personas que los ensayaron dijeron sentirse confortables con ellos porque son como acolchonados y más suaves al tacto.
El revolucionario invento por el momento será opcional en el nuevo Explorer ’11, pero Ford planea extenderlo paulatinamente a todos sus modelos.
De seguro, será una medida imitada por otros fabricantes. |
